Saltar al contenido

Acumulando por la zona

Buenas noches!

Estos días atrás, aprovechando que el día es largo y no me importa madrugar para salir con la bici (así luego tengo el resto del día para trabajar/familia), he salido tres días así de paso, voy testeando la actualización del motor Shimano E8000 de mi WRC E10.

El lunes la idea era andar por la zona del Tangorri lo máximo posible, intentando enlazar todas las subidas que tiene, cubriendo todos los caminos. Desde Badostain hacia Ardanaz, por Epermendi, bonita subida con roderas que en seco se hace bien pero con barro… se las trae. Viene la primera del día, la típica subida al Tangorri por la pista principal de la GR 220. Sin problemas hasta arriba. Ahora toca bajar hacia Aranguren pero no por la pista, sino por «El rincón del Poche», primero entre pinos y luego por la pista que baja entre Lizardi y Bexuin. Ojo llegando al pueblo de Aranguren que hay cadena echada y te la puedes comer perfectamente. Giro a izquierdas y vuelta a subir de nuevo, pista larga con tramos con bastante pendiente, que nos dejará en la base del Aritzko.

Giro a derechas y buscamos la entrada al camino de Yelz, en bajada. Ojo antes de llegar a dicho camino porque hay una palomera caída y los andamios salen hasta el camino. La bajada a Yelz con tramos muy malos, mucha maleza y buenos agujeros. Pero con cuidadico, sin problemas. Este camino nos lleva hasta la carretera que sube al pueblo, al cual ni entraremos puesto que nada más llegar, cogemos un camino a derechas que nos lleva a Azpa, para afrontar la tercera subida. Quizá ésta es la subida que más me gusta de todas, aunque tenga premio final, la «cuesta de la muerte». En esta ocasión, tomo el camino de la derecha para subir hacia el Tangorri (en vez de volver al Aritzko). Aquí con el modo TURBO puesto sin problemas hasta que una puta piedra me hace echar el pie al suelo por patinazo (otro día será).

Sin llegar al Tangorri, giramos a izquierdas y de nuevo por el «Rincón del Poche» hacia Aranguren, pero en vez de bajar al pueblo, giramos a derechas en subida para coger la senda denominada «La bonita». Si no la conoces, tardando estás, y su nombre por algo lo tiene puesto. Bajada hasta Ardanaz y sin llegar al pueblo, giro a derechas para hacer de nuevo la subida al Tangorri, por la vía normal. Delante mía subía otro ebiker con una Scott, pero subía más ligero que yo, más atrancado pero más rápido. En la vaguada que va del Tangorri al Aritzko le pasé y a seguir dando pedales, buscando la bajada hacia Aranguren, y de ahí, para casa.

En ésta salida salieron 36,5 km y 1300 mts acumulados. Bien, agusto.

La segunda salida que tenía pensada para acumular, a vista de Compe GPS, se veía de puta madre, y en mi recuerdo también, puesto que quería pasar por caminos que en su día transitaba, y no estaban tal cual lo tenía en la mente.

La teoría era sencilla: subir por Aranguren para bajar hacia Yelz, pero sin llegar hasta abajo, giro a derechas y rumbo a Lerruz, y de ahí, a Idoate.

Como siempre, poniendo las calles

Así que vamos para allí, pisteo por Aranguren, amaneciendo y disfrutando de la fresca mañana. La subida por el pueblo de Aranguren siempre se me hace larga, aún con la ebike. La tengo cruzada desde siempre, no sé por qué pero… es lo que hay. Una vez arriba, a buscar el camino de bajada a Yelz.

Y aquí viene ya cuando la matan… bueno, el camino hacia Lerruz con bastante vegetación, pero transitable. Lo malo estaba por llegar…

Llegamos a Lerruz y cruzamos el pueblo, buscando una pista de hormigón que se ve que pica para el monte y gira a izquierdas, donde termina y empieza la tortura. Leído así puede sonar mal, pero joder que ruina de camino. Muy estropeado, mucha mucha piedra, mucha rodera, vegetación hasta la altura de los cojones… menos ciclable, de todo. Tuve susto gordo en una rodera que me metí hasta el cuello

Y este es uno de los tramos más apañados

Pero como soy de esas personas que salen con la bici a disfrutar y a ver paisaje, la gocé como un enano, puesto que las vistas desde aquí, son maravillosas

Llegamos a Idoate, «sin problemas» y ahora aquí es buscar la pista que nos sube hacia el Potxe, dejándonos en la muga del «Bosque de las Hadas» con la «Sierra de Góngora». Aquí opté por bajar por la mano izquierda, rodeando el centro de recuperación de animales, y llegando a Ilundain, para coger la cañada real que nos llevará hasta el pisteo de Aranguren. Y bordeando la balsa por Sotoburu, vuelta para casa. Agusto agusto

En esta ruta salieron 35 km y 981 mts.

Y la tercera en discordia, pues tocaba subir al Castillo de Irulegui. Quería hacer algo rápido sin complicación, así que directamente, la primera en la frente 🙂

Que el amanecer te pille pedaleando

Pisteo por Aranguren, subir al pueblo de Aranguren y coger el camino que baja hacia Ilundain, para girar a «mitad camino» hacia la izquierda, y por senda, subir hasta Lakidain. Llegados al pueblo cruce y seguir rumbo al castillo, perfectamente señalizado. No me explico que la gente pueda subir por aquí montada al completo, apenas hay tracción y mucha pendiente. Ojo que mi falta de habilidad también cuenta, no lo olvidemos.

La subida es bonita, tramos técnicos con giros de casi 90 grados se van combinando, hasta «coronar» a la altura del pinar, para salir al claro y seguir subiendo. Llegar a la campa y ver arriba las ruinas del castillo, junto a su derecha los pirineos… una gozada. Estuve bastante rato arriba, disfrutando de las vistas.

Este tipo de fotos (perfiles) me vuelven loco

Os dejo esta RESEÑA al blog de mi amigo y tocayo Oscar Guindano, para que conozcáis un poco más la historia de este bonito paraje.

La bajada la hice por donde subí, ya que no quería portear las escaleras que nos dejan en el «Bosque de las Hadas». Y vuelta a Aranguren para subir al Aritzko y al Tangorri, y vuelta para casa. 28 km y 900 mts positivos.

Como podéis ver, es la zona que me pilla más a mano desde casa y la disfruto mucho. AQUÍ TENEÍS LOS TRACKS. Habrá tramos que no conozca pero creo que tengo todo bastante bien trillado. Habrá que seguir sumando para Sunbilla 🙂

La próxima entrada será sobre un libro que puedo decir, me cambió la vida o la forma de ver una vida más sana. Bueno, más bien su autor, Javier Angulo. Esta semana lo tendréis.

Un abrazo!!

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies